Exodo 25:10 Harán también un arca de madera de acacia, cuya longitud será de dos codos y medio, su anchura de codo y medio, y su altura de codo y medio.
Después de salir de Egipto y recibir la Torá (El Antiguo Testamento) en el Sinaí, a los judíos se les ordenó construir un Tabernáculo. En el epicentro del Tabernáculo estaba el Arca de la Alianza en la que se colocaban las tablas de piedra.
Hecha de madera de acacia (hbr. shittim) y medía medio codo (hbr.amah) de largo, un codo (hbr.amah) y medio de ancho y un codo (hbr.amah) y medio de alto (aproximadamente 52×31×31 pulgadas), el arca estaba cubierta de oro por dentro y por fuera, y adornada con una corona o moldura de oro llamada zeir. Cuatro anillos de oro estaban unidos a sus cuatro esquinas, dos a cada lado. A través de estos anillos, se insertaron varas de madera de acacia recubiertas de oro para transportar el Arca, que la Torá ordenó que nunca se quitara. Los levitas de la casa de Kehath usaban las varas para llevar el arca, porque estaba prohibido transportarla en carretas.
Llevando el Arca de la Alianza por el desierto
Estaba cubierto con una tapa de oro (kapporet) que estaba adornada con dos querubines de oro, o figuras aladas, uno frente al otro.
El Arca albergaba las tablas, grabadas con los Diez Mandamientos, que Moisés bajó del Monte Sinaí, los pedazos rotos del primer juego de tablas y un rollo de la Torá. Un cántaro de maná y la vara milagrosa de Aarón se colocaron directamente frente a él. El Arca se encontraba en el Lugar Santísimo, el santuario más recóndito donde solo entraba el Kohen Gadol (Sumo Sacerdote) y solo en Yom Kippur. En el Primer Templo, el arca se encontraba en even sh'tiyah, la piedra fundamental, pero en el Segundo Templo no había Arca de la Alianza en el Lugar Santísimo. El rey Ezequías es la última figura bíblica que se menciona que vio el Arca.
El Talmud explica que cuando el Rey Salomón construyó el Templo, construyó una alcoba en lo profundo del Monte del Templo para ocultar el Arca en caso de que fuera necesaste lugar donde el Rey Josías, previendo la destrucción del primer Templo aproximadamente 35 años antes de que sucediera, mandó esconder allí el Arca (II Crónicas 35:3). El Talmud también presenta una opinión opuesta que afirma que el arca fue exiliada a Babilonia.
Josué pasando el río Jordán con el Arca de la Alianza
La literatura judía atribuye muchos atributos milagrosos al Arca. La literatura dice que cuando los Kohanim (sacerdotes) la levantaron para transportarla, en lugar de llevar el Arca, el Arca los llevó a ellos. Además, cuando los Hijos de Israel cruzaron el río Jordán hacia Israel, Josué envió primero el Arca, llevada por los Kohanim (sacerdotes). Cuando entraron en el agua, el río se dividió y cruzaron por tierra seca.
En los días del profeta Samuel, los Hijos de Israel llevaron el Arca a la batalla contra los filisteos con la esperanza de que les traería la victoria. Pero los filisteos ganaron la batalla y capturaron el Arca santa, llevándola al templo pagano de Dagón en Asdod. Por la mañana, el ídolo del templo fue destruido y los filisteos enfermaron de hemorroides. Los filisteos devolvieron el Arca a Israel (I Samuel 4-5).
El Talmud también explica que el Arca no ocupaba ningún espacio físico. El Lugar Santísimo tenía 10 codos de ancho, y el Arca, que estaba en el centro, tenía una longitud de 2,5 codos. Sin embargo, al medir desde los lados del Arca hasta la pared, todavía había cinco codos desde los lados del Arca hasta las paredes.
La Iglesia Ortodoxa Tewahedo de Etiopía afirma poseer el Arca de la Alianza en Axum. Según la iglesia, el Arca fue traída a Etiopía por Menelik I, el hijo del rey Salomón, en el siglo X a. Actualmente, el Arca se guarda bajo custodia en un tesoro cerca de la Iglesia de Nuestra Señora María de Sión. Solo una persona, designada como Guardián, puede ingresar al edificio y mirar el Arca. El Guardián, como su título lo indica, debe proteger el Arca y tiene prohibido salir de los terrenos.